“Navegar"

"Andar sin rumbo, buscar un sentido a todo, pensar en todo lo que haces"...cuando alguien viene y me dice que no sabe que hacer con su vida, yo le suelo preguntar, si poder contestar a todo lo anterior, realmente sirve de algo. Conozco barcos que con un rumbo claro, han terminado varados y anclados. Otros en cambio aprovechan el viento y navegan sin rumbo: "navegar por navegar ".

Me pregunto muchas veces si buscarle un sentido a todo te orienta o desorienta realmente, ¿qué sentido tiene preocuparse por cosas que no podemos resolver?, el camino aunque con niebla sigue siendo camino y no desaparece aunque no lo veamos. Pensar nos hace únicos porque nos permite mejorar, siempre que pensemos para mejorar, pero ¿realmente pensamos para eso? o muchas veces nos desgastamos retrocediendo y reprochándonos lo que pudimos o no haber hecho.

Por todo lo anterior cuando "andes sin rumbo, nada tenga sentido y todo lo que haces te salga mal", recuerda que lo contrario en muchas ocasiones no es mejor.

¡BASTA YA!

Las empresas creen que a través del miedo pueden hacer lo que quieren, "miedo a perder el empleo, miedo a recibir una amonestación, miedo a que te critiquen, miedo a que hablen mal de ti, en definitiva "miedo al miedo". Lo peor es que "este MIEDO " son los propios empleados los que lo alimentan y lo hacen poderoso. Hoy he querido hablar para aquellxs especialmente vulnerables:  padres y madres y muchas veces sustentadoras de la familia, lo viven muy de lleno, aunque también aplica para todxs los que tienen alguna obligación o responsabilidad. El miedo no lxs deja descansar, lxs llena de ansiedad, lxs hace vivir un día a día muy cerca del infierno donde los demonios son sus superiores, a los cuales se les da un valor sobre humano  hasta el punto de verles y empezar a temblar. Esto ocurre porque escuchamos a los demás verbalizar sus propios temores, se produce una especie de contagio verbal en el que todxs añaden algo más a estos miedos con los cuales cabe preguntarse si hay alguién que no se identifique con ellos : "si me echan de que voy a vivir", "como pagaré el alquiler de este mes", "soy la unica que gana un sueldo en casa" "que van a comer mis hijos" "como voy a pagar su colegio".... el miedo al miedo termina propagandose como una mancha de tinta en un papel.  Cuando ocurre esto, alguién debe decir BASTA, alguién les debe recordar a todxs que tenemos derechos y que son fruto de la lucha de muchxs trabajadorxs que fueron capaces de superar y enfrentarse a sus miedos. Ahora tenemos todxs una enorme responsabilidad y no es otra que la de hacerlos valer, la responsabilidad de afiliarse para hacerse fuertes, la responsabilidad de no admitir los abusos, la responsabilidad de no permitir el acoso de un compañerx. Nos ha tocado vivir en un mundo que reclama IGUALDAD en todos los sentidos (sexo, raza, religión...), un mundo que permite gracias a las redes sociales y los avances en la comunicación, ser escuchados en todos los foros y lugares del mundo. Por eso es bueno reflexionar y superar nuestros miedos porque ya lo dijo Emiliano Zapata lider de la revolución mejicana“Es mejor morir de pie que vivir de rodillas”.  No dejes que nadie te ponga las cadenas del miedo, siempre hay esperanza y detrás de una lágrima puede haber una vida de alegría.