jueves, 17 de febrero de 2022

La Felicidad

 En una ocasión el discípulo pregunto al sabio por los sentimientos. Se sentía abrumado porque no se sentía feliz aún teniendo todo lo que quería. Había momentos en que una sensación de vacío le nublaba la mente y le hacía sentirse solo, desganado e incluso desvalido. 

El sabio le pregunto al discípulo si realmente todo lo que él creía que era la felicidad realmente lo era. El discípulo le contesto que estaba claro que la felicidad dependía de conseguir todo lo que uno quiere para sentirse bien y disfrutar de esta vida tan corta. El discípulo se sentía infeliz porque buscaba la felicidad en sus anhelos, en sus sueños, en un futuro mejor. 

El sabio le dijo entonces que la felicidad no era un sentimiento: " la felicidad es construir, crear, compartir, sentir... Todo lo que surge de ahí te hará mejor y cuando el tiempo pase eso será lo único verdadero".

Muchas veces buscamos fuera lo que está dentro de cada uno de nosotros, lo que ya tenemos, lo que cuando nos falta nos hace sentir nostalgia y nos dice que hemos perdido algo importante. Soy de los que creen que la felicidad es la armonía que vive en nuestro interior y  por eso no la disfrutamos cuando la tenemos pero si cuando la perdemos.

Te propongo que por unos instantes descubras que o quienes  te hacen sentirte bien , mira a tu alrededor y descubre tu felicidad camuflada del día a día.

sábado, 12 de febrero de 2022

Llorar

 Sin ningún motivo, sin pensarlo, sin saber como, sin saber por quién...así empezó todo y así probablemente todo acabará.

Llorar nos hace únicos, inigualables y sin embargo muy desgraciados generalmente. No se aprende a llorar, ni se enseña aunque haya actores y personas que lo hacen cuando quieren. Llorar surge de una emoción: en ocasiones de la tristeza y la rabia y en otras pocas veces de la alegría. Llorar es soltar, dejar salir, responder, hundirse, caer... Al llanto se le asocia con frecuencia el dolor y lo acompaña como compañero de lucha mientras la intensidad es fuerte.

Pocas veces se llora de alegría y este llanto es vivo, espontáneo, sincero y agradecido. No es muy frecuente pero cuando surge por ese motivo el cueroo se  llena de vida e ilusión.

Para mi el llanto es esencia, lo más puro que fabrica nuestra alma, transparente y profundo. La manifestación de que somos frágiles y a la vez profundamente fuertes. Llorar es bueno y malo sobre todo cuando se mantiene en el tiempo. No te puedes permitir hacerlo como un hábito ya que te debilita y te impide ver las cosas bellas de la vida. 

Llora si, pero por poco tiempo, luego levántate y vive tu presente, y si tienes que llorar hazlo de alegría, quierete mucho sin ningún motivo, sin pensarlo, sin saber como, sin saber por quién...así empezó todo y así probablemente todo acabará.